La Sala Segunda confirma sentencia contra Ex Trabajadora del Banco Popular por el extravío de 25.000 dólares en basurero.
Alto Tribunal considera que excolaboradora actuó con negligencia al no ingresar al sistema el depósito de una remesa por $25.000 que fue «custodiada» en un basurero por otra funcionaria.
Una exfuncionaria de una sucursal del Banco Popular y Desarrollo Comunal deberá pagar a esa entidad $18.750 (¢9,3 millones) como sanción por haber extraviado $25.000 en un basurero, el 17 de noviembre del 2007. Así lo dejó en firme la Sala Segunda de la Corte Suprema de Justicia, de setiembre del 2013.
El fallo fue la conducta de la trabajadora por negligencia en sus labores y responsabilidades, por tolerar a otra trabajadora un procedimiento inadecuado en el trámite de depósito de una remesa por $25.000, procedente de otra entidad financiera.
La exfuncionaria sancionada estaba a cargo de la tesorería de una oficina del Banco Popular. Mientras ella estaba fuera, otra funcionaria de apellido Alfaro recibió el depósito.
Durante el proceso, ella aceptó que ese 17 de noviembre, en su tiempo de café, la funcionaria de apellido Alfaro le pidió autorización para ingresar a la tesorería de la sucursal.
Alfaro no le informó las razones por las que necesitaba ingresar a esa oficina, ni le comunicó del depósito realizado en su ausencia y que ella (Alfaro) había «custodiado» en el basurero de dicho despacho.
El descuido le impidió constatar que se efectuó un depósito por la suma de $25.000, que fue colocado en el basurero y al cual nunca se le dio el trámite respectivo para ingresarlo a la bóveda de la sucursal bancaria.
Se agrega que la «conducta negligente propició que el dinero permaneciera en el contenedor de la basura y que eventualmente fuera sacado del banco con el resto de los desperdicios para ser enviados al botadero municipal».
El Banco Popular afirma que ese tipo de prácticas no se pueden tolerar y que no son procedimientos habituales en la entidad financiera.
En el análisis del caso, los magistrados aclararon que a la exempleada del Popular en ningún momento se le atribuyó una conducta dolosa; sino que el descuido en sus funciones propició una gran pérdida a la entidad bancaria.
El Banco Popular emitió una sanción civil y disciplinaria para la extesorera, que estableció el pago del 75% del monto botado a la basura y el reembolso de ocho días de salario dejados de percibir. La funcionaria apeló contra esas sanciones en nombre de Alfaro, a quien se le cobró el otro 25% del monto extraviado, sin embargo la petición fue rechazada.
El fallo del alto tribunal se basó en un video de seguridad que permitió determinar «que al regreso de la actora de su tiempo de café, en su cubículo estaba la boleta correspondiente al depósito de $25.000, que fue archivada sin mayor trámite».
El director jurídico del Banco Popular, Armando Rojas, aclaró que los hechos por los que fue despedida la funcionaria no son prácticas frecuentes en el Banco y que en su momento ella fue despedida sin responsabilidad patronal.
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